Desde hace poco más de una década los terrenos del norte de Alcorcón
(que suponen aproximadamente un 40 % de la superficie de Alcorcón, es
decir unos 13 millones de metros cuadrados), rodeados de autovías (M-40
al este, M-50 al oeste, N-501 al norte y N-V al sur), han sido
comprados por especuladores que han buscado enriquecerse a través de la
recalificación de los terrenos pasando de suelo rústico a urbanizable.
Entre los propietarios del suelo actuales destacan terratenientes locales (Juan Benigno Alonso y Pablo González), inmobiliarias (como Metrovacesa, Acciona, Realia,…), y el Ministerio de Defensa. Por su parte, el Banco de Santander ha ampliado sus terrenos en la próxima Boadilla del Norte.
Todo empezó en 1999, cuando dentro del nuevo Plan General de Ordenación Urbana (PGOU), la Comunidad de Madrid dejó en suspenso el reconocimiento como suelo no urbanizable protegido el norte de Alcorcón.
El gobierno municipal encabezado por Pablo Zuñiga (PP) intentó en tres ocasiones, entre 1999 y 2003, urbanizar con chalets el norte de Alcorcón mediante proyectos de subsanación del PGOU de 1999.
Entre los propietarios del suelo actuales destacan terratenientes locales (Juan Benigno Alonso y Pablo González), inmobiliarias (como Metrovacesa, Acciona, Realia,…), y el Ministerio de Defensa. Por su parte, el Banco de Santander ha ampliado sus terrenos en la próxima Boadilla del Norte.
Todo empezó en 1999, cuando dentro del nuevo Plan General de Ordenación Urbana (PGOU), la Comunidad de Madrid dejó en suspenso el reconocimiento como suelo no urbanizable protegido el norte de Alcorcón.
El gobierno municipal encabezado por Pablo Zuñiga (PP) intentó en tres ocasiones, entre 1999 y 2003, urbanizar con chalets el norte de Alcorcón mediante proyectos de subsanación del PGOU de 1999.