Cada mes que el PP se mantiene en el poder es un año de retroceso en políticas sociales de este país.
Entre sobre y sobre, el Gobierno del Partido Popular ha decidido cortar por lo sano con el descontento social que inundan las calles de toda la península elaborando la conocida como Ley de Seguridad Ciudadana.
El anteproyecto fruto de la discordia, ya aprobado por el Consejo de Ministros, no es más que una recopilación de las nuevas infracciones que se pueden cometer fácilmente en cualquier manifestación. Pero, ¿sabemos realmente la profundidad que dicha ley pretende alcanzar, así como el cerco que el Gobierno pretende levantar sobre el derecho de manifestación, de huelga, o el propio derecho a la libertad de expresión? Es por ello por lo que vamos a enumerar los principales puntos represores que la nueva ley gesta en su interior:
1. MANIFESTARSE: participar en manifestaciones comunicadas a la Delegación del Gobierno no será sancionable, pero en caso de no ser así podremos ser sancionados con multas de entre 100€ y 1.000€. Aquellos que convoquen movilizaciones vía redes sociales podrá ser multado por la misma cuantía -aunque al final ni asistamos a la misma-. En caso de disturbios en la movilización, elconvocante podrá ser multado con 30.000€ e Interior valorará que sólo se exima de dicha sanción si condena y muestra rechazo público a los altercados. Igualmente para aquellos que participen en losaltercados, Interior podrá sancionarlos con multas de entre 1.000€ y 30.000€, si "causa desórdenes graves o incendios". Y como joya de la corona, todas aquellas manifestaciones a las que Interior les otorgue el calificativo de "coactivas", repartirán entre sus participantes sanciones que oscilarán entre los 30.000€ y 600.000€ -Instituciones del Estado, Cortes, Sedes Políticas, etc.-.