Prácticamente el solo ha conseguido descontaminar el Cascajo en Perú. Marino Morikawa es un científico peruano que empleó todos sus ahorros, incluido un préstamo, y todo su conocimiento para salvar un humedal que visitaba cuando era un niño.
El humedal estaba tan sucio y contaminado que las autoridades planeaban cubrirlo, entonces decidió recuperarla por su cuenta y con sus propios recursos.
Con sus conocimientos adquiridos en la universidad japonesa de Tsukeba, Marino desarrolló un sistema simple y barato de descontaminación, con materiales que se pueden comprar en cualquier ferretería.