Al
menos 187 colmillos de marfil fueron requisados hoy por las fuerzas de
seguridad de Camerún cuando eran trasladados en un camión militar al
aeropuerto internacional de Yaundé, informan los medios locales.
Las
autoridades, citadas por la emisora de radio camerunesa CRTV, explicaron
que el marfil no era transportado por militares, sino que los
traficantes utilizaron un camión similar a los que usa el Ejército para
poder eludir en el camino los controles de seguridad.
El vehículo,
interceptado por los agentes en una zona boscosa, llevaba 187 colmillos
de elefante, aunque por el momento no se han practicado detenciones.
El
tráfico de marfil es cada vez más habitual en Camerún, donde el
incidente más grave ocurrió en diciembre de 2012, cuando más de 300
elefantes fueron asesinados en el parque natural de Bouba Ndjida, en el
norte del país.
Desde entonces, las autoridades han intensificado las
medidas para luchar contra la caza furtiva, incluida la construcción de
barreras para separar las zonas donde habitan los animales de las áreas
pobladas por personas.
La caza furtiva de elefantes y otras
especies, como los rinocerontes, es habitual en países que albergan gran
número de estos animales, como Sudáfrica, Kenia o Camerún.
Algunos
de estos mamíferos están en peligro de extinción, debido a la presión de
los furtivos para arrancar sus cuernos y colmillos, a los que atribuyen
propiedades medicinales y afrodisíacas en países de Asia, destino de
muchos de estos cargamentos ilegales.
Unos 22.000 elefantes africanos
murieron a manos de cazadores furtivos en 2012, cifra inferior a los
25.000 de 2011, según datos del Comité Permanente de la Convención
Internacional para la Protección de Especies Amenazadas (CITES).
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Si quieres hacer un comentario sobre este articulo, hazlo aquí, gracias.