08 junio 2016

Libre comercio de aceite de palma y deforestación

Suiza está negociando un tratado de libre comercio con Indonesia y Malasia. El aceite de palma tiene un papel impor­tante en el mismo. Ambos paí­ses del sudeste asiático son, con diferencia, los principales productores de aceite de palma y, al mismo tiempo, los que más deforestan el planeta.

Deforestacion aceite de palma
Por favor, firme nuestra petición al Bundesrat (Consejo Federal) para que el comercio de aceite de palma no sea aún más fácil con el tratado de libre comercio entre Suiza, Indonesia y Malasia.

Un 85% del aceite de palma que se comercia en el mundo (55 millones de toneladas) procede de Indonesia y Ma­lasia. NESTLÉ utiliza 445.000 toneladas al año. La exportación creciente de acei­te de palma a Suiza crece a costa de la producción de aceite de colza -mucho más saludable por sus omega 3- y, sobre todo, de las selvas tropicales del sudes­te de Asia.

Ahora, la palma de aceite se extien­de en Indonesia y Malasia sobre una su­ perficie cinco veces mayor que Suiza. Y aumentará -según el Ministerio de Agri­cultura indonesio- hasta 26 millones de hectáreas más. Para hacer sitio a las plantaciones de palma se talan selvas y se desplazan poblaciones. En este mo­mento, miles de hectáreas de selva se encuentran en llamas en Indonesia y la gente se asfixia con el denso humo que cubre toda la región.

La organización suiza Bruno Manser Fonds y el sindicato agrario Uniterre cri­tican este tratado de libre comercio. En las negociaciones, el aceite de palma es el punto más sensible. “Con el Plan de Acción Economía Verde, aumentará la demanda de aceite de palma certificada según los criterios de la Mesa Redonda de Aceite de Palma Sustentable RSPO, en el marco de los acuerdos voluntarios”, escribe el Bundesrat (Consejo Federal suizo). El gobierno suizo elude su responsa­bilidad con excusas de “negocios verdes”, “acuerdos voluntarios” y “sellos de certi­ficación” creados por la propia industria.

Por favor, rechacen el tratado de libre comercio, el maquillaje verde de los nego­ cios, y el engaño a las y los consumidores.

Fuente: lagarbancitaecologica.org

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