Greenpeace celebra la lucha contra la sobrepesca, la madera ilegal y para salvar el Ártico

La organización Greenpeace ha hecho balance de 2013, del que celebra las medidas tomadas en el marco de la Unión Europea en contra de la sobrepesca o para evitar la entrada de madera ilegal al espacio europeo, así como la creación de un movimiento mundial de más de cuatro millones de personas para salvar el Ártico. Sin embargo, entre las cosas a lamentar, la ONG ha denunciado los "graves recortes sociales y ambientales", en es especial mediante la Ley de Costas y la ley de Seguridad Ciudadana.

   Para Greenpeace, "las mejores noticias" para el medio ambiente en 2013 "a pesar de la actitud netamente negativa del actual Gobierno frente a las políticas ambientales" son varias campañas de la organización que han obtenido buenos resultados.

   Así, uno de estos hitos es la nueva Política Pesquera Común porque el texto acordado por los Veintiocho obliga a poner fin a la sobrepeesca en 2015 para casi todas las poblaciones de peces. La nueva norma, que beneficiará a la pesca sostenible, comenzará a aplicarse a partir de enero de 2014 e incorpora elementos como la transparencia en el registro de la flota pesquera o el establecimiento de criterios ambientales y sociales en las cuotas pesqueras.

Oceana revela que los Estados de la UE dieron 4.900 millones de euros en 'subvenciones ocultas' al sector pesquero

Desde el año 2000 el total de ayudas al sector supera los 12.900 millones de euros.

Hoy, Oceana ha hecho públicos los resultados de un estudio de siete meses sobre el gasto real efectuado por los Estados Miembro en subvenciones para el sector pesquero desde el año 2000. El informe concluye que para este periodo, los países de la UE concedieron 4.900 millones de euros al sector pesquero utilizando el mecanismo de Ayudas de Estado. Esta cantidad viene a sumarse a los 8.000 millones de euros concedidos bajo los mecanismos oficiales de subvenciones de la UE. 

Irlanda, España, Italia y Francia lideran el gasto, con un 75% del total.  A pesar de los compromisos de transparencia de la UE, Oceana resalta las dificultades a la hora de identificar y determinar en qué se ha empleado el dinero del contribuyente y las cuantías totales.