Accion de Greenpeace |
El pasado 6 de junio, un
tribunal de Amsterdam le dio la vuelta a la tortilla a las peticiones abusivas
que hacía la petrolera Cairn Energy contra Greenpeace por intentar salvar el
Ártico de la exploración petrolífera. En lugar de conceder las medidas
cautelares pedidas por la empresa en contra de Greenpeace, propuso que en
realidad la petrolera podría considerar en serio la petición de Greenpeace y
que publicara su Plan de Contingencias ante vertidos de petróleo en el Ártico
que hasta el momento ha mantenido secreto.
Al parecer, los abogados de Cairn
miraron al juez atónitos ya que no tenían ni idea de por qué su cliente no los
quería publicar.
El juez continuó diciendo que el
hecho de que BP escatimara en una segunda válvula para el pozo Macondo le costó
miles de millones al mundo a causa de la catástrofe de la Deepwater Horizon. BP
declaró lamentar que no se hubieran analizado de forma independiente sus
planes, sobretodo porque alguien se habría dado cuenta de la falta de una
segunda válvula de seguridad.
La seguridad es un tema de
interés para todos. Garantizando transparencia, tal vez haya una oportunidad
para que el plan de respuesta a vertidos pueda ser mejor. De hecho, el mismo
juez le pidió a Cairn, “¿por qué no van a publicar su plan? Ahora mismo, digo.
¿Por qué no lo publican ahora?” No podría haberlo dicho mejor.
Ahora se está tratando de hacerle
llegar esta noticia a los 18 activistas que todavía permanecen en la cárcel en
Groenlandia tras ser arrestados el pasado sábado después de escalar la
plataforma petrolífera de Cairn Energy en el Ártico precisamente para exigir la
publicación del Plan. Seguro que les encantará ver cómo la reivindicación de su
acción va tomando cuerpo.
Pero volvamos al tribunal:
cuentan los que estuvieron ahí que tras las declaraciones del juez, los
abogados de Cairn Energy sudaban ya un poco, pero él aún no había terminado...
Llegó a preguntarse cómo Cairn Energy podría financiar las labores de limpieza tras
cualquier tipo de vertido de petróleo en el Ártico. Fue impresionante, sin
duda, cuando el equipo legal de Cairn Energy trató de tranquilizarle alegando
que había un límite a la exposición financiera de la compañía en caso de
vertido. El juez dijo que no creía que la preocupación se refiriera a la salud
de las finanzas de Cairn, más bien se refería al impacto sobre el medio
ambiente y a los costos de las labores de recuperación y limpieza.
Así que, ahora también el
tribunal holandés se une a nosotros y a los 18 activistas encarcelados
actualmente en Groenlandia para exigir que se haga público el Plan de
Contingencias ante vertidos de petróleo que Cairn mantiene secreto.
Cairn debe cesar de inmediato las
operaciones de perforación en el Ártico. Cada minuto que se permite perforar en
el Ártico plantea una amenaza inaceptable para el medio ambiente en busca de un
petróleo que no nos podemos permitir el lujo de quemar si no queremos destruir
el clima.
Cairn Energy ha recibido un buen
rapapolvo en la sala de la corte holandesa ayer, mientras trataba de silenciar
unas protestas pacíficas y de esconderse del escrutinio público.
El juez tomará una decisión final
sobre la medida cautelar en la noche del miércoles. Esto no ha terminado
todavía. Os seguiremos contando, mientras Greenpeace se queda en el estrecho de
Davis frente a las costas de Groenlandia.
Sara Pizzinato, campaña de Petróleo de Greenpeace
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