La tendencia orgánica llegó a 162 países, que certificaron más de 37 millones de hectáreas. En ellas trabajan 1,8 millones de productores, que generan un negocio de unos US$62.800 millones anuales, según datos de la Federación Internacional de Movimientos de Agricultura Orgánica (IFOAM).
Argentina se suma a esta inclinación, aunque no tanto por volumen sino por la amplia oferta de orgánicos. Sólo en bienes de origen vegetal el país exporta más de 80 productos y la demanda continúa en ascenso.
Justamente una de las principales cualidades que tienen es que no cuentan con conservantes, aditivos artificiales u otros productos químicos…La esperanza que tenemos es que este crecimiento conserve las mismas características naturales de estos productos y no se malogren, desvirtúen o se vuelvan industriales. Justamente una de las principales cualidades que tienen es que no cuentan con conservantes, aditivos artificiales u otros productos químicos.
¿Alguna vez sintió deseos de comer un “pollo de campo” en vez de los de supermercados? Probablemente esté de acuerdo en pagar unos pesos de más y adquirir estos alimentos que son criados en una granja y acceden a pasturas naturales.
En cambio, a los pollos no orgánicos se les inyectan hormonas y antibióticos para estimular su crecimiento y se crían hacinados en galpones. No solo no son saludables, sino que además cuando se los cocina quedan tan pequeños como una paloma. “Los pediatras mismos dicen que no se deben comer esos pollos en exceso”, dijo en una entrevista a La Gran Época Juan Carlos Herrero, secretario de la Federación Agraria Argentina.
¿Cuáles son los alimentos orgánicos?
Se consideran “orgánicos” aquellos alimentos-en general los vegetales y las frutas-en los que en ninguna etapa de su producción intervienen fertilizantes, herbicidas o pesticidas químicos y sustancias tóxicas reales o potenciales para la salud humana, así como tampoco en los suelos donde son cultivados.En el caso de las carnes, como los pollos o las vacas, para cumplir con el requisito de ser orgánicos, deben estar alimentados totalmente con granos que no hayan sido tratados genéticamente ni cultivados en suelos fertilizados con productos químicos (aunque sí podrían serlo con fertilizantes orgánicos). Además estos animales tampoco deben recibir hormonas o antibióticos.
En el caso de la leche -para que sea considerada orgánica-, la vaca debería estar alimentada 100% con granos o pasturas naturales…En el caso de la leche -para que sea considerada orgánica-, la vaca debería estar alimentada 100% con granos o pasturas naturales. Debido a que los suelos están tan contaminados de pesticidas, es difícil lograr esto, ya que los químicos permanecen en la tierra por largos periodos de tiempo. Por eso las granjas “a la antigua”, donde conviven animales que comen las pasturas y abonan la tierra, son las mejores “fábricas” de productos orgánicos.
Categorías de orgánicos:
100% orgánicos: son aquellos productos sin ingredientes no orgánicos.Orgánicos: para los productos con un 95% de los ingredientes de tipo orgánico.
Hechos con productos orgánicos: para los productos realizados entre un 50 y 95% con ingredientes orgánicos.
Productos con menos del 50%: de los ingredientes orgánicos, se deberá especificar en cada ingrediente que sea orgánico.
Clasificar de esta manera es lo ideal para que la situación sea más clara para el consumidor y pueda optar sabiendo bien los atributos de lo que compra.
Desde la perspectiva legal, un producto orgánico es aquel que está certificado por una autoridad competente. Por ejemplo en Argentina, la Cámara de Certificadoras nuclea a las empresas habilitadas por el Estado para tal fin.
Actualmente se producen todo tipo de alimentos bajo protocolos orgánicos: carnes, miel, aceitunas, azúcar, yerba, té, café, legumbres, frutas, hortalizas, vinos, aceites, lácteos, huevos, etc., con toda la variante de derivados y formas de comercialización, por ejemplo, congelados, conservas y dulces, es decir, toda la producción agropecuaria y su correspondiente agroindustria.
El valor de consumir orgánico
La principal ventaja de los alimentos orgánicos es que están absolutamente libres de residuos químicos.
Tampoco están permitidos los aditivos y conservantes, plaguicidas y fertilizantes,no tienen residuos de medicamentos veterinarios, no contienen hormonas ni tampoco metales pesados presentes en suelos y aguas.
La carne proveniente del animal que se cría en forma natural (las pasturas frescas, forrajes y granos que consume también deben ser orgánicos), tiene más cantidad de vitamina E-que es antioxidante- y menos grasa intramuscular -porque no está inmovilizado en un “feedlot”-, produciendo menos colesterol en el consumidor.
Además, las carnes orgánicas no sufren de contaminación biológica, como ser el mal de la vaca loca (encefalopatía espongiforme bovina), la fiebre aftosa, la intoxicación con E.coli (famosa en hamburguesas industriales), ni salmonelosis (en huevos y aves), ya que las certificadoras controlan la trazabilidad en los ganados.
Más allá de los beneficios para la salud que implica consumir orgánico, cuando compra este tipo de productos, está ayudando a los agricultores a crear un ambiente saludable para la vida silvestre.
Por otro lado los alimentos orgánicos tienen mejor sabor, aroma, color y son más nutritivos que los convencionales.
Si bien estos últimos no se pueden extinguir en el corto plazo, debido a que el sistema alimentario actual se basa en biotecnología y productos de laboratorio, lo importante es que las personas podamos conocer las diferencias entre productos convencionales y orgánicos y, en este contexto, podamos elegir en base a lo que nos parece más conveniente para nuestra salud y para el medio ambiente.
Fuente: Periodismo-alternativo.com
Tampoco están permitidos los aditivos y conservantes, plaguicidas y fertilizantes,no tienen residuos de medicamentos veterinarios, no contienen hormonas ni tampoco metales pesados presentes en suelos y aguas.
La carne proveniente del animal que se cría en forma natural (las pasturas frescas, forrajes y granos que consume también deben ser orgánicos), tiene más cantidad de vitamina E-que es antioxidante- y menos grasa intramuscular -porque no está inmovilizado en un “feedlot”-, produciendo menos colesterol en el consumidor.
Además, las carnes orgánicas no sufren de contaminación biológica, como ser el mal de la vaca loca (encefalopatía espongiforme bovina), la fiebre aftosa, la intoxicación con E.coli (famosa en hamburguesas industriales), ni salmonelosis (en huevos y aves), ya que las certificadoras controlan la trazabilidad en los ganados.
Más allá de los beneficios para la salud que implica consumir orgánico, cuando compra este tipo de productos, está ayudando a los agricultores a crear un ambiente saludable para la vida silvestre.
Por otro lado los alimentos orgánicos tienen mejor sabor, aroma, color y son más nutritivos que los convencionales.
Si bien estos últimos no se pueden extinguir en el corto plazo, debido a que el sistema alimentario actual se basa en biotecnología y productos de laboratorio, lo importante es que las personas podamos conocer las diferencias entre productos convencionales y orgánicos y, en este contexto, podamos elegir en base a lo que nos parece más conveniente para nuestra salud y para el medio ambiente.
Fuente: Periodismo-alternativo.com
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Si quieres hacer un comentario sobre este articulo, hazlo aquí, gracias.