La Junta de
Castilla y León mata al último lobo de los cuatro que tenía previsto La Junta
de Castilla y León mató ayer al último lobo de los cuatro que había anunciado
en febrero que abatiría al sur del Duero, tras una reunión con organizaciones
agrarias. Según la Junta, la muerte de este macho de entre dos y tres años, en
una finca de Salamanca, está justificada por los ataques al ganado producidos
por el lobo en la provincia durante estos últimos meses. WWF considera
inaceptable esta nueva muerte y ha denunciado los hechos ante la Fiscalía de
Medio Ambiente, para que investigue si se están cumpliendo las directivas
europeas.
Al sur del
Duero el lobo está estrictamente protegido por ley y además este ejemplar macho
ha sido abatido en plena época de cría. Para WWF, se trata una vez más de un
acto que no se justifica legalmente, ya que además no se ha demostrado que se
hayan agotado otras medidas alternativas. Según confirmó la Junta tras anunciar
la muerte de este lobo, se debió a los ataques que sufrían los ganaderos de la
zona. Sin embargo, no ha informado sobre dónde se producían esos ataques, el
número, las medidas preventivas que se han aplicado o si el lobo abatido
pertenecía a la manada que causaba esos daños.