Indígenas matsés de la Amazonia peruana y brasileña han denunciado la amenaza de exploraciones petroleras en sus tierras ancestrales, que son el hogar de pueblos indígenas no contactados.
Los matsés viven en la Frontera amazónica de los no contactados,
una franja de selva a caballo entre las fronteras de Perú y Brasil,
hogar del mayor número de pueblos indígenas aislados del planeta.
En
sus tierras ancestrales hay dos lotes petroleros. El primero está en un
área habitada por pueblos indígenas no contactados. En 2012, la empresa
petrolera canadiense Pacific E&P inició la exploración petrolera en este lote y se dispone ahora a hacerlo de nuevo .
La
prospección petrolera es devastadora para los pueblos indígenas
aislados. Son los pueblos más vulnerables del planeta y cualquier
operación en sus tierras aumenta el riesgo de contacto no deseado: La
historia muestra que la exploración petrolera puede aniquilar a tribus
no contactadas, que carecen de inmunidad frente a las enfermedades que
propagan los forasteros.